Calor, sudor y mascarilla

Como ya hemos avanzado, es mejor evitar el uso de mascarilla en la playa, siempre y cuando sea posible cumplir con el distanciamiento social de más de dos metros.

Usarlas cuando hace mucho calor podría ser dañino para tu salud, ya que la humedad o el sudor que se genera al respirar podría provocar irritaciones, rojeces y quemaduras, y agravar problemas dermatológicos ya existentes.

Te recomendamos también que en verano lleves más de una mascarilla a mano: la arena y el sudor hacen que se vuelvan inservibles.

Además, nuestra piel necesita que la cuidemos. Sigue estas pautas para protegerla:

• No apliques maquillaje bajo la mascarilla para evitar su efecto contaminante.
• Lávate la cara antes de colocar la mascarilla con jabón suave o agua micelar.
• Cambia o lava la mascarilla con frecuencia (infórmate bien de la duración de la mascarilla que usas).
• Hidrata la cara al regresar a casa.
• Elige una crema protectora de absorción fácil, en el caso de usar la mascarilla de manera intermitente.

Las manos siempre limpias

La mejor manera de evitar la propagación de gérmenes y de protegernos de enfermedades es tener las manos limpias. El gel hidroalcohólico es esencial para evitar el contagio del virus pero cuando vamos a la playa o a la piscina, y nos exponemos tantas horas al sol, lo adecuado es no utilizarlo. ¿Por qué? el uso del gel mientras tomamos el sol puede tener consecuencias negativas en la piel.

A simple vista pueda parecer que este tipo de geles se absorben y evaporan en pocos segundos, pero en realidad no es así. Sus componentes se mantienen en la piel por un tiempo prolongado, y los rayos del sol podrían provocar alteraciones como manchas o quemaduras.

¿Una alternativa para tomar el sol sin preocupaciones? Lavarse las manos con agua y jabón es la mejor solución para unas manos limpias y protegidas.

1. Lávate siempre las manos antes de comer y al salir y entrar a casa.
2. Sécate las manos sin frotar, con toallas u otros elementos que pueden causar irritación; en su lugar, es preferible utilizar papel secante.
3. Aplica una crema de manos absorbente después de su limpieza.

Ahora que ya sabes cómo protegerte estas vacaciones… ¡a preparar la bolsa de la playa!

¡Desde Clínica Corachan os deseamos un feliz verano!