Con la llegada del verano y la “operación bikini”, muchas personas practican deporte de alta intensidad sin estar preparadas físicamente y una de las consecuencias que esto provoca son las lesiones.
Las más comunes son aquellas relacionadas con el ligamento cruzado provocadas por la práctica de deporte de impacto que implica detenerse, saltar y cambiar de dirección de forma repentina como el fútbol, básquet, tenis, esquí, etc.
¿Sabrías cómo identificar una lesión en el ligamento?
En la mayoría de los casos, hay una serie de síntomas que te pueden hacer sospechar de una lesión de esto tipo, pero es importante recordar que debes acudir a un médico para que te haga un correcto diagnóstico. Los síntomas pueden ser:
- Chasquido fuerte en la rodilla.
- Dificultad cuando tratas de apoyar la pierna.
- Dolor intenso e incapacidad de poder seguir caminando por el dolor.
- Hinchazón en la parte afectada.
- Inestabilidad y pérdida de parte del movimiento.
Cómo se diagnostica y cómo tratarlo
Para diagnosticarlo, el médico examina la rodilla del paciente mediante pruebas de estabilidad. Si cree que hay una lesión, realizará una prueba más específica (radiografía, imágenes por resonancia magnética o ultrasonido), para evaluar la gravedad y saber cómo tratarla.
Hay varios tratamientos para esta lesión:
- Los cuidados de primeros auxilios pueden reducir el dolor e hinchazón de inmediato y consisten en:
- Reposo: necesario para sanar y limitar el peso que debe soportar la rodilla.
- Hielo: es recomendable ponerlo en la rodilla cada dos horas durante 20 minutos cada vez.
- Compresión: se recomienda envolver la rodilla con vendaje elástico para que haya compresión alrededor y esté protegida.
- Elevación: es recomendable poner algún objeto por debajo para que la pierna esté elevada.
- Rehabilitación. En algunos casos, es necesario acudir a sesiones de rehabilitación con un fisioterapeuta para realizar ejercicios determinados que ayuden a la mejoría de la lesión.
- Cirugía. El grado de inestabilidad que presente la rodilla tras la lesión será determinante Si al paciente no le responde bien la articulación y la lesión es grave, se deberá operar. En este caso, el proceso de tratamiento y recuperación es más largo.
Es importante que, en caso de padecer alguno de los síntomas explicados anteriormente, acudas a tu centro médico de referencia para que te hagan un correcto diagnóstico. En Clínica Corachan contamos con una unidad de rodilla formada por un equipo experto de profesionales especializados que te harán un diagnóstico completo, y un seguimiento de todo el proceso de la lesión y recuperación.