¿Qué es una endoscopia digestiva?

La endoscopia digestiva es una técnica mínimamente invasiva que permite visualizar directamente el interior del tubo digestivo mediante un endoscopio, un tubo flexible equipado con una cámara. Puede realizarse por vía oral (gastroscopia) para explorar esófago, estómago y duodeno, o por vía rectal (colonoscopia) para examinar el colon y el recto.

Gracias a esta prueba, los especialistas pueden detectar alteraciones como úlceras, pólipos, inflamaciones o tumores, y tomar muestras (biopsias) para analizarlas con precisión.

¿Cuándo se recomienda?

Aunque muchas personas relacionan la endoscopia con síntomas digestivos como dolor abdominal, acidez o sangrado, lo cierto es que esta prueba también se utiliza con fines preventivos, especialmente en personas con riesgo elevado de cáncer digestivo.

Se recomienda en los siguientes casos:

• A partir de los 50 años (o antes, si hay antecedentes familiares) como parte del cribado del cáncer colorrectal.
• Antecedentes familiares de cáncer digestivo (colon, estómago, esófago).
• Personas con enfermedades inflamatorias intestinales crónicas (colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn).
• En presencia de pólipos detectados previamente.
• En pacientes con síntomas persistentes, como anemia sin causa clara, pérdida de peso involuntaria o alteraciones en las heces.

¿Por qué es tan importante en la prevención del cáncer?

Porque permite detectar lesiones precancerosas o tumores en fases muy tempranas, cuando el tratamiento es mucho más eficaz y menos invasivo.

Por ejemplo:

• Un pólipo en el colon puede extirparse durante la colonoscopia, evitando que evolucione a cáncer.
• Una úlcera gástrica sospechosa puede biopsiarse antes de que se convierta en un carcinoma gástrico.
• La endoscopia también permite detectar infecciones como el Helicobacter pylori, relacionadas con el cáncer de estómago.

Todo esto se realiza antes de que aparezcan los síntomas, cuando la enfermedad aún es silenciosa.

¿Es una prueba segura?

Sí. La endoscopia es una técnica segura, rápida y con mínimas complicaciones. En la mayoría de los casos se realiza con sedación, para que el paciente esté cómodo y relajado durante el procedimiento.

En Clínica Corachan, contamos con un equipo de digestólogos expertos y tecnología de última generación, lo que garantiza precisión diagnóstica, seguridad y trato humano en todo momento.

Conclusión: tu salud digestiva merece atención, incluso si te sientes bien

El cáncer digestivo suele desarrollarse en silencio, sin dar síntomas hasta fases avanzadas. Por eso, la endoscopia no solo es una prueba diagnóstica, sino una herramienta fundamental de prevención. En la Clínica Corachan te acompañamos en el cuidado integral de tu salud digestiva.

Recuerda: una endoscopia a tiempo puede marcar la diferencia. Consulta con tu médico si es el momento adecuado para hacerla.

Dr. José Llach, especialista en Aparato Digestivo